Esta es la historia de José Alberto Gutiérrez que abandonó su trabajo de recolector de residuos para crear una biblioteca comunitaria en La Nueva Gloria, barrio al sur de Bogotá.
Este ciudadano colombiano trabajaba en la empresa Lime como recolector de basura y cuando realizaba su labor encontraba entre las bolsas que los vecinos botaban un buena cantidad de libros. Por su gran afición a la lectura comenzó a recogerlos para su biblioteca personal, que por aquellos tiempos contaba con sólo 600 obras.
Su sueño fue poder compartir su biblioteca personal con los vecinos del barrio. En la actualidad, La Fuerza de las Palabras, así se denomina su biblioteca posee unos 8.000 títulos y su idea es que siga en aumento no sólo la cantidad de libros sino también las bibliotecas comunitarias para los barrios pobres del resto del país.
miércoles, 24 de diciembre de 2008
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